Si pudiera vivir nuevamente mi vida, en la próxima trataría de cometer más errores. No intentaría ser tan perfecto, me relajaría más. Sería más tonto de lo que he sido, de hecho tomaría muy pocas cosas con seriedad. Sería menos higiénico. Correría más riesgos, haría más viajes, contemplaría más atardeceres, subiría más montañas, nadaría más ríos. Iría a más lugares adonde nunca he ido, comería más helados y menos habas, tendría más problemas reales y menos imaginarios.

Yo fui una de esas personas que vivió sensata y prolífica mente cada minuto de su vida; claro que tuve momentos de alegría. Pero si pudiera volver atrás trataría de tener solamente buenos momentos.
Por si no lo saben, de eso está hecha la vida, sólo de momentos; no te pierdas el ahora.
Yo era uno de esos que nunca iban a ninguna parte sin un termómetro, una bolsa de agua caliente, un paraguas y un paracaídas; si pudiera volver a vivir, viajaría más liviano.
Si pudiera volver a vivir comenzaría a andar descalzo a principios de la primavera y seguiría descalzo hasta concluir el otoño. Daría más vueltas en calesita, contemplaría más amaneceres, y jugaría con más niños, si tuviera otra vez vida por delante.

domingo, 31 de julio de 2011


Una guitarra por demás desafinada, un frío alquimista que todo transforma en hielo. Una canción que de movida está arruinada. y una autoestima, ya muy adherido al suelo.
Las esperanzas guardadas en un cajón, no tienen pilas, yo que más le puedo hacer Por dios que difícil que se hace componer cuando me falta tu calor.
Y me resulta imposible sacarla de mi cabeza un camino de ida y vuelta que termina en la cerveza en la cerveza...
Y ruego a dios que esto termine para poder ser el de antes, que no llora por mujeres y tiene siempre un amante... siempre un amante...
Ideas que vuelan pero que nunca aterrizan metáforas como cuentos sin moraleja. Del quinto piso está chistándome una vieja que como yo ya se olvidó de la sonrisas.
Un verso triste que me acaban de vender, y lo zapatos que me aprietan el talón. Disculpen que sea tan triste mi canción, es que no la volveré a ver.
Y tengo miedo a equivocarme, a sufrir, ser lastimado, equivocarme es algo humano pero amarte es un pecado.... es un pecado...
Porque conozco yo el calibre de tus besos, ya no me dejo asesinar por esa boca.
No pongo un pleno, más por vos, no tengo un peso, mejor le cedo a otro el turno, que me toca... que me toca...